Abandonó las dietas y perdió 72 kilos

Perder peso puede ser una auténtica tortura. Las personas que se someten a dieta lo saben perfectamente. Hay que restringir cantidades, eliminar alimentos, contabilizar calorías, reprimirse el hambre… Sufrir, sufrir y más sufrir, para que en ocasiones ni siquiera se consigan resultados visibles.

Teena Henson, una norteamericana que llegó a pesar 150 kilogramos (mide 1,60 metros de altura), encadenaba una dieta tras otra, empeñada en reducir su peso. Pero la aguja de la báscula no se movía. Un buen día, cambió drásticamente de estrategia. Dejó las dietas… y empezó a perder kilos. ¡Ahora pesa 78!

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No es que haya descubierto esa fórmula mágica con la que todas soñamos, sino que Teena tuvo que esforzarse para conseguir lo que se proponía. Pero, en lugar de concentrarse en los alimentos que podía o no podía comer, se apuntó al gimnasio. Empezó a andar más, y a cuidar su alimentación. Sólo tuvo que eliminar los elementos más dañinos de su menú diario. Modificó unos pequeños detalles, y el cambio ha sido espectacular. Hoy, Teena se siente feliz con su peso y es la prueba viviente de que no existe dieta más poderosa que la fuerza de voluntad.