Una niña de dos años es congelada tras su muerte para resucitar en el futuro

Niña de dos años criogenizada. Murió de un cáncer cerebral a los dos años y ha sido congela a la espera de encontrar cura en el futuro.

A principios de año, la pequeña Matheryn Noavaratpong murió debido a un cáncer cerebral. El cáncer se le fue detectado cuando sus padres, que son médicos, llevaron a la niña de solo dos años una noche de urgencias al Hospital de Bangkok. Allí detectaron que Matheryn tenía un cáncer de 11 centímetros en el cerebro. Los próximos meses, la vida de su familia se convirtió en un infierno de pruebas y cirugías. Debido a las operaciones, la niña perdió el 80% del lado izquierdo de su cerebro. Aunque no dejaron de luchar con ella, llegó un momento en el que sus padres supieron que era el final. Fue entonces cuando sus padres contactaron con Alcor Life Extension Foundation, una de las grandes empresas que se dedica a la criogenización. Ellos extrajeron el cerebro de Matheryn y lo guardaron en acero inoxidable, conservado al vacío en un recipiente de nitrógeno líquido. El cuerpo se depositó en un criorefrigerador.

De esta forma, Matheryn Noavaratpong esperará a que se encuentre una cura y los medios para regenerar su organismo. Sus padres son positivos respecto al tema y tienen esperanzas, aunque ha sido un proceso y una decisión muy dura. 'Jugamos con ella y la abrazamos antes de quitarle el soporte vital', declarada su madre.

Esta niña de dos años criogenizada se ha convertido en la persona más joven sometida a este procedimiento.