Pedro Lourenco Primavera/Verano 2012

Pedro Lourenco Primavera/Verano 2012

Viendo este desfile solo podía pensar en este dicho "si no tienes nada bueno que decir mejor no digas nada". Y eso sería lo que haría, pero no trabajo para hacerme la muda o la que no escribo, que aquí mi voz son los dedos.

Un desfile repleto de siluetas rectas hechas para que el disañador reciba el aplauso de sus colegas, pero que no embellece a quien lo lleva (¿la moda no iba de eso?). Pero cuidado, eso sí se ve ha sido y que el diseñador le ha dedicado esmero y paciencia a crear estas piezas, de las que quedan salvables un par de pantalones cortos.

Después me dirás que si critico que siempre se haga lo mismo, pero es que se pueden hacer piezas originales como las de Gareth Pugh y después se pueden hacer colecciones en tierra de nadie. Ni tradicionales ni inminentemente modernas. Me ha cansado. No quería ver más. Los desfiles son como películas. Cuando tu interés decae por lo que estás viendo en la pantalla grande (en este caso en la pasarela), la cosa va mal. Esto suele pasar a menudo en el cine y en los desfiles hacia la mitad. En ese momento te puedes permitir meter lo más flojo, para luego resurgir como un ave fénix y dejarnos a todos boquiabiertos. No esperes que eso ocurra con esta colección.