barra head

Sancionan a una trabajadora por ir a ponerse una compresa

sancion menstruacion trabajo Una trabajadora de Correos fue sancionada por ir al baño a ponerse una compresa.

A veces, cumplir con tus tareas y obligaciones durante los días de la menstruación no es nada fácil. La falta de energía, el dolor, el malestar o el estado de ánimo son algunos de los síntomas de muchas mujeres tienen que combinar con su trabajo diario durante toda una semana. No pedimos que en nuestro puesto de trabajo nos hagan ningún favor o nos den un día libre por estar menstruando pero, al menos, que no nos lo compliquen aún más.

Por suerte, seguro que la mayoría de vosotras tenéis jefes y jefas comprensivos con este tipo de situaciones, pero no todo el mundo es tan afortunado. Hace unos días, una mujer que trabaja en Correos fue sancionada por abandonar su puesto de trabajo para ir al baño cuando le vino la menstruación por sorpresa.

La trabajadora asegura que, por un desajuste hormonal que padece, la regla le vino por sorpresa y manchó sus pantalones, así que salió corriendo hacia el vestuario para cambiarse de ropa, coger una compresa e ir al baño a ponérsela. La acción no le llevó más de diez minutos, pero esto fue tiempo suficiente para que su jefa la estuviera esperando a la vuelta para ponerle una sanción.

“Tardé diez minutos porque tenía que subir unas escaleras, me había manchado el pantalón y tuve que ir a la taquilla a por ropa para cambiarme y ponerme una compresa”, cuenta la trabajadora. “Cuando llegué, me estaba esperando mi jefa de equipo y me dijo que tenía que firmar que había abandonado mi puesto de trabajo. Yo respondí que solo había ido al cuarto de baño”.

Lo peor de este caso es que justo sea una mujer, su jefa, la que muestre esta falta de comprensión y empatía hacia algo que todas, en algún momento de nuestras vidas, hemos vivido.

Debido al incidente, la empleada ha sido multada y se le descontará de la nómina el dinero que corresponde a esos diez minutos que, aunque no es mucho, es algo que “no tiene por lo que pasar”, tal como ella misma argumenta. “Es tercermundista aguantarse las ganas de ir al servicio o que te sancionen por hacerlo”, cuenta la trabajadora.

El ambiente de este lugar de trabajo no parece ser muy cómodo, tal como han asegurado algunos de sus compañeros a raíz de su sanción. Los empleados de Correos aseguran que es un lugar “tóxico” en el que “ponen trabas para ir al baño o descansar el cuerpo cambiando de postura”.

Ser sancionada por ir al baño a ponerse una compresa no parece algo de esta época. Esperamos que este tipo de actitudes en los puestos de trabajo vayan desapareciendo cuanto antes.

¿Te gusta? ¡Puntúalo!

18 votos

Noticias relacionadas