Tantoo Cardinal revela su sencilla pero eficaz rutina de cuidado de la piel

Bienvenidos a Shelf Life, donde las famosas explican hasta el último detalle de sus rutinas de belleza. Hoy, la actriz Tantoo Cardinal, de 73 años, nos habla de la belleza de su herencia indígena y de los productos para el cabello, la piel y el maquillaje que utiliza dentro y fuera de la alfombra roja.

En la comunidad de Fort McMurray (Alberta, Canadá), donde creció la actriz Tantoo Cardinal, no había agua corriente ni electricidad, pero a veces sí había maquillaje. "Las mujeres tenían que ser duras y fuertes, pero se sentían orgullosas de cómo se presentaban", explica a Allure. "Mi madre y mi abuela, si cogían el tren para ir a la ciudad, siempre se maquillaban y se aseguraban de tener buen aspecto. Era algo que observaba, y por mis venas corre una relación con la belleza".

Cardinal, de ascendencia cree y métis, ha aparecido en más de 120 películas y series de televisión a lo largo de sus cinco décadas de carrera, la más reciente de las cuales es Asesinos de la flor de la luna, de Martin Scorscese, nominada a 10 premios de la Academia, incluido el de mejor película. Gracias a su éxito, Cardinal ha estado en un torbellino reciente de alfombras rojas, confiando en dos profesionales de confianza (uno de ellos de ascendencia Lakota) para intensificar su aspecto de una manera que sigue siendo auténtica a su herencia.

Crear una rutina de cuidado de la piel eficaz me ayudó a abrazar mi afrolatinidad ¿Debería añadir el cuidado de la piel con luz azul a su rutina antienvejecimiento?

"Estoy asombrada de lo cómoda que me siento siendo más visible, poniéndome delante de la gente y siendo dueña de mi belleza. No crecí pensando que tenía una cara bonita porque había un trasfondo de que [las mujeres nativas] no cumplían los cánones de belleza de la sociedad. Es hora de reivindicar la belleza que proviene de las mujeres de mi linaje", explica. "Con un equipo increíble a mi alrededor para los grandes momentos, salgo por la puerta con mi mejor cara. Siento que me veo tan bien como puedo, ¡lo que no está nada mal para tener 73 años!".

"No está nada mal" es un eufemismo. Aquí, la radiante septuagenaria comparte la rutina diaria que hay detrás de su resplandor.

Lo bueno de estar en los 70 en términos de belleza es que ha habido tanta investigación y creaciones maravillosas para mantener la piel y el cuerpo sanos.

Cuando estaba haciendo el programa Stumptown, conocí a Kristen Rowland de Opalino Day Spa [en Los Ángeles], que estaba justo al final de la manzana del B&B en el que vivía. Ella me presentó el cuidado de la piel de Lira Clinical, que me encanta porque está basado en la naturaleza. Para la hidratación y la humedad, me gusta la Bio Lift Crème, la Bio Caviar Crème y el limpiador, que uso día y noche.

Cuando tengo un evento, cuento con mi glamman principal , Darrell Redleaf, que es lakota. Conoce mi cara, conoce mi pelo, conoce mi piel y, lo que es más importante, conoce mi corazón y mi espíritu. No me hará sentir incómoda. He trabajado con muchos maquilladores a lo largo de los años en los que nunca confié cuando se trataba de glamour porque no sabía lo que iban a hacer, pero con Darrell me siento segura.

En mi rostro, utiliza The Foundation de Clé de Peau y Synchro Self-Refreshing Concealer de Shiesedo porque no son pesados. Mi piel puede respirar y no me siento alterada, sólo mejorada. Pero me gusta el color y un poco más de dinamismo, así que Darrell trabaja con el estilista y nos divertimos con pestañas, sombras de ojos brillantes y pintalabios como Pillow Talk de Charlotte Tilbury.