10 consejos para la fotodepilación casera con luz pulsada

Si vas a optar por la fotodepilación casera con luz pulsada, sigue estos 10 consejos. 

La idea de eliminar el vello de forma permanente es tan tentadora, que cada vez son más las mujeres que eligen la depilación definitiva con luz pulsada. Y si, además de eliminarlo para siempre, puede hacerlo cómodamente en casa, ¿quién puede resistirse a este método? Aunque la fotodepilación casera con luz pulsada parece el método perfecto, no olvide que hay algunas precauciones y recomendaciones que debes seguir.

1. Afeita antes la zona: los pelos largos restan efectividad a la fotodepilación, por lo que es mejor que afeites la zona a depilar unas horas antes. Esto solo será necesario en las primera sesiones.

¿Qué tan efectiva es la depilación con luz pulsada? ¿Qué pasa si me depilo con luz pulsada todos los días?

2. Tapa tus lunares: los lunares hacen que la fotodepilación sea muy intensa en esa zona debido a la melanina. Protégelos, por ejemplo, con un lápiz de ojos blanco.

3. Hazlo por la noche: este método de depilación no duele, aunque es posible que, cuando lo utilices por primera vez, no regules bien la potencia y notes un leve pinchazo que te irrite la piel. Si lo haces antes de dormir, la irritación habrá desaparecido al día siguiente. 

4. Primero las zonas sensibles: comienza por las zonas sensibles, ya que, conforme la uses, la fotodepiladora se irá calentando y es mejor no usarla en zonas con mayor sensibilidad. Empieza por la zona del bikini, las axilas o la cara.

5. Piel limpia y fría: es bueno tomar una ducha antes para que la piel esté perfectamente fría. Sin embargo, debes esperar a que se enfría después de una ducha caliente, ya que la raíz del vello absorbe mejor la piel cuando está fría. 

6. Empieza con sesiones cortas: si nunca la has usado, ve poco a poco. Comienza depilando una zona pequeña y con una intensidad baja. También es bueno empezar en una zona poco sensible, por ejemplo, las piernas.

7. Hazlo de forma homogénea: no te distraigas y cambies de actividad en medio de la depilación, porque es muy importante que trates a todas las zonas por igual. Podrías pasar varias veces por la misma zona y no es bueno. 

8. Tu sensibilidad: la sensibilidad de cada persona es totalmente distinta, por lo que no servirá que una amiga te aconseje sobre la forma en la que ella utiliza la fotodepiladora. Deberás encontrar la intensidad que te resulta cómoda.

9. Depilación del rostro: asegúrate de que tu fotodepiladora es adecuada para el rostro, porque no todas lo son. Aún así, no es recomendable nunca emplearlas en las cejas. Consulta aquí los consejos para la depilación del rostro.

10. Al acabar, refresca la piel: aunque no tiene por qué irritarte la piel, puede que esta esté un poco enrojecida cuando termines la sesión. Para calmarla, aplica un poco de hielo envuelto en un paño sobre la zona. 

¿Te animas a probar la fotodepilación casera con luz pulsada? Recuerda que también existen otros métodos de depilación casera definitiva.