Juana Rivas se ve obligada a entregar a sus hijos a un maltratador
Este lunes, Juana Rivas no ha podido huir más y se ha visto obligada a entregar a sus hijos a su exmarido, condenado por violencia de género.
Desde el pasado mes de julio, los medios han seguido la lucha de esta madre por permanecer junto a sus hijos y evitar entregarlos a su ex marido, del cual huyó porque la maltrataba. Juana Rivas ha recibido desde el principio el apoyo en las redes, donde se popularizó el hashtag #Juanaestáenmicasa, pero esto no ha sido suficiente.
La mañana del pasado lunes 28 de agosto, a Juana Rivas no le quedó más remedio que entregar a sus hijos, de 3 y 11 años, a la Guardia Civil para que esta los llevara a Italia junto a su padre, Francesco Arcuri, el maltratador de Juana.
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Hace un año que Juana huyó de Italia, donde vivía con sus dos hijos y con el padre de ambos, un hombre que fue condenado a tres meses de prisión en 2009 por malos tratos. Cuando cumplió la condena, Juana volvió con él, pero al ver que la situación no cambiaba y ella seguía siendo maltratada física y mentalmente, decidió huir del país, llevándose a sus hijos para protegerlos.
El 26 de julio de este año, Juana, desesperada, huyó ilegalmente para esconder a sus hijos y evitar entregarlos a su padre, que era lo que la justicia pedía después de un año. A principios de agosto, el juzgado emitió una orden de detención contra ella por retención ilícita y desobediencia de la justicia.
La semana pasada, cuando se presentó en los Juzgados de Granada sin sus hijos, fue detenida. Aunque pedían prisión sin fianza para ella, el juez decidió, en el último momento, dejarla en libertad.
Pero su tiempo se ha terminado y esta madre se ha visto acorralada completamente por la justicia, sin más opciones para proteger a sus hijos. Por ahora, los dos niños marchan hacia Italia para vivir con su padre, el hombre que fue condenado por maltratar a su madre.
