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Esta pareja lesbiana con un hijo tendrá que mentir para poder registrarlo

LGTB

madres italianasEsta pareja lesbiana italiana no podrá registrar a su hijo a no ser que mientan diciendo que “tuvieron relaciones con hombres”.

Hay muchos casos que nos dejan claro por qué debemos seguir luchando para que todas las personas tengan los mismos derechos. En Italia, no fue hasta el año pasado cuando se permitieron los matrimonios civiles entre personas del mismo sexo. Pero, a pesar de este avance (mucho más tarde que en otros países), hay otros asuntos relacionados con la comunidad LGTB en la que también van atrasados.

La historia de Chiara Foglietta y Micaela Ghsleni ha servido para sacar a la luz un problema para las parejas italianas del mismo sexo que quieran tener hijos. Esta pareja, viajó a Dinamarca para poder someterse a un tratamiento de inseminación artificial ya que en su país no estaba permitido. Cuando por fin dieron a luz a su hijo Niccolo Prieto, fueron a inscribirlo en el registro de su país, como cualquier otro padre haría.

Fue allí donde se encontraron con el problema: los funcionarios le “aconsejaron” que la madre que dio a luz mintiese y dijera que había tenido relaciones sexuales con un hombre. Así podría inscribirlo como su hijo (nunca como hijo de las dos). Chiara se negó a mentir en un documento público, sabiendo además que no tenía por qué, ya que no había hecho nada malo.

Ahora, la pareja ha emprendido una lucha para poder registrar a su hijo como el hijo de ambas y para que otras parejas homosexuales no tengan que pasar por lo mismo que ellas. “Solo queremos que cambien las cosas”, explica Chiara en un post que publicó en su cuenta de Facebook contando su historia.

“Cada niño tiene derecho a conocer su historia, todo lo que le ha rodeado y los eventos relativos a su concepción”, explica la madre. “Niccolo vino al mundo porque así lo quisimos Micaela y yo. Es nuestro hijo. Pero, para poder inscribirle en el registro, he de mentir”, se lamenta.

La leyes italianas, que se basan en un decreto del año 2002, no preveían entonces que las mujeres pudieran recurrir a estas técnicas de reproducción asistida para tener hijos. Ahora, esta ley está completamente obsoleta y necesita ser modificada. Esto es lo que reclaman Chiara y Micaela, alegando que son las leyes las que tienen que adaptarse a la realidad, no al revés.

Esta pareja de madres lesbianas italianas seguirán reclamando su derecho a registrar a su hijo como suyo. “No por mi, por Niccolo y por todos los bebés arco-iris”.

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