6 razones por las que la masturbación femenina es necesaria

La primer experiencia orgásmica femenina tiende a ser un pequeño secreto. Ya sea porque nos notamos distintas, o bien, porque no nos podemos mover. Sea como sea siempre decidimos no decírselo a nadie, conscientes de alguna manera de que lo que acababa de experimentar era demasiado tabú.

Esta es la cuestión: Las mujeres se masturban. Quizás tu primera experiencia en la masturbación no fue con un dildo sino con un oso panda de peluche que te miraba con un ojo. Sea lo que sea, no importa quién o qué te excita, importa que hablemos de ello y que nos sintamos libres de hacerlo sin vergüenza.

Los beneficios de la masturbación son muchos para las mujeres especialmente. "Nos volvemos poderosas" cuando nos masturbamos. Llega un momento en tu vida, que no sólo acudes a una sexshop para encontrar las medias más transparentes y agujereadas para tu novio, si no que también, para jugar con tu cuerpo y ¡ojo! que es un mundo que no conocemos y es muy interesante  y placentero...

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Estos son los beneficios más poderosos de la masturbación que te convencerán de invertir algo de tiempo en ti lo antes posible:

1.La masturbación sienta muy bien: psicológica y fisiológicamente

Obviamente, masturbarse sienta fenomenal, tu clítoris tiene 8.000 terminaciones nerviosas, razón suficiente para alcanzar el "vibrador natural supremo". Hay vías de placer reales en el cerebro que se fortalecen con la masturbación. Cientos de investigaciones aseguran que cuando las mujeres piensan en esas partes [de su cuerpos], son capaces de activarlas y convertirlas en vías perfectas para una mejor sensación en el cuerpo, especialmente las placenteras.

El placer por sí solo es razón suficiente para masturbarse, algo con lo que las mujeres no siempre se sienten cómodas.

Así que adelante: Posee tu orgasmo, te pertenece a ti antes que a nadie más.

2. El auto-placer puede ayudar a mejorar tu vida sexual con una pareja, ¿qué tal si todos ganan?

Saber lo que sienta bien es importante por algo más que la razón obvia: una vez que sabes lo que te excita, puedes enseñarle a tu pareja.

Si tienes ganas de traer a un extraño al círculo de confianza, masturbarse le ayudará a saber qué movimientos son los "familiares" y cuáles debe defender (bajándote todo el calentón). Es muy útil conocerse a sí mismo y abogar por tus propias necesidades.

3. Masturbarse ayuda a activar el apetito sexual

Es martes por la noche y estás cansada; tu pareja quiere "juguetear", pero tú prefieres Netflix y dormir. Levanta la mano si esta situación te resulta familiar.

Si te ocurre, es totalmente normal. Una caída del deseo ocurre en muchas personas, en particular en las mujeres en relaciones a largo plazo. Pero tomarse el tiempo para masturbarse puede aumentar el apetito sexual cuando se está con una pareja.

Volvamos al concepto de las vías de placer: cuanto más las recorras por tu cuenta, más fácil será encontrarlas cuando estés con tu pareja. Cuando las mujeres se masturban, estamos activando los sistemas que activarán nuestro apetito sexual y, de una manera más grande, incluso nuestro apetito por la vida. Buscar el placer de nosotros mismos con nosotros mismos es una buena manera de mantener esos sistemas neuroquímicos y hormonales preparados.

4. Todo ese amor propio puede ayudarte a desestresarte y relajarte de la misma manera que la meditación o la atención plena.

Hay cuatro etapas en el ciclo de respuesta sexual: deseo, excitación, orgasmo y resolución, cada una de las cuales viene con ondas de fluctuaciones hormonales. En pocas palabras, la estimulación genital, con o sin orgasmo, disminuye lo malo (la hormona del estrés, el cortisol) y aumenta lo bueno (las endorfinas), desencadenando esa sensación de apuro y liberación. Al estudiar el placer y el cerebro se ha podido ver la activación cerebral durante la estimulación, lo que significa que el cerebro recibe oxígeno, lo que es realmente bueno para él. De hecho, un estudio sugiere que niveles más altos de actividad sexual pueden ayudar a proteger el funcionamiento cognitivo a medida que envejeces.

La masturbación también puede ser una práctica de la mente. Piénsalo: Concentrarse en tu propio placer no deja espacio para el estrés de las listas de tareas o lo que sea que te cause ansiedad en el trabajo. Masturbarse puede ser un camino muy placentero hacia un estado zen. La masturbación puede darte espacio para sentirte realmente presente, estableciendo una conexión entre la atención y el placer. Haz del auto-placer una parte de tu rutina de auto-cuidado; puede que te guste más que un spa.

5. La masturbación ayuda a dormir mejor por la noche.

En la última etapa del ciclo de respuesta sexual, la resolución, no es raro experimentar fatiga.Tiene sentido; tu cuerpo acaba de experimentar muchos espasmos y contracciones musculares, un torrente sanguíneo y picos en la presión sanguínea, el ritmo cardíaco y la respiración.

6. Cuando te sientes cómodo con la masturbación, nadie puede legislar tu orgasmo.

El orgasmo femenino se trata de placer, no tiene nada que ver con la reproducción. Es hora de apropiarse de esa idea, y la masturbación puede ayudar. Toma una postura ahora para ser dueño de nuestros cuerpos; encuentra el placer en ellos. Si pudiera decirle algo a esa mujeres que experimentan orgasmos en silencio sería: No escondas el placer que sientes por ti misma. Díselo a tus amigos, diles que lo transmitan, y díselo a tu hija algún día: Las mujeres deben y se masturban.