En West Hollywood, los clientes de los negocios con alto riesgo de transmisión de COVID-19 tendrán que presentar una prueba de vacunación completa
La ciudad de West Hollywood, California, ha emitido una orden ejecutiva de emergencia que exige a los clientes de los negocios con alto riesgo de transmisión del COVID-19 que demuestren que están totalmente vacunados a partir del 11 de octubre.
Todo el personal que "trabaja habitualmente" en estas empresas también tendrá que cumplir este requisito antes del 1 de noviembre, según la orden.
Entre los negocios incluidos en la orden figuran todos los establecimientos que sirven comida o bebida en el interior, las instalaciones de salud y fitness, las instalaciones municipales y los establecimientos de cuidado personal, como los servicios de cosmetología, los salones de tatuajes, los salones de uñas, las peluquerías y las barberías.
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Todos estos lugares suponen un riesgo elevado de transmisión porque los clientes se quitan las mascarillas y están muy cerca de otras personas, según la orden.
"El COVID-19 sigue representando una amenaza inminente para la salud y la seguridad de los miembros de la comunidad y las personas no vacunadas corren un mayor riesgo de sufrir enfermedades graves y de morir", tuiteó el concejal de West Hollywood John D'Amico tras la emisión de la orden.
Las formas aceptables de prueba incluyen las tarjetas de vacunación de los CDC, una foto o copia de la tarjeta de vacunación, la documentación de la vacunación de un proveedor de atención médica o un registro digital de vacunas COVID-19 emitido por el estado, según la orden.
Las personas que no presenten una prueba de vacunación completa podrán seguir utilizando las partes exteriores de las instalaciones de las empresas cubiertas.
-Ciudad de West Hollywood (@WeHoCity) 11 de septiembre de 2021
Aunque se ofrecieron algunas alternativas, los profesores afiliados al Centro Petrie-Flom de la Facultad de Derecho de Harvard consultaron algunas de las políticas de la orden para evitar el mal uso de las exenciones médicas.
Las personas con exenciones médicas legítimas tendrán que proporcionar una prueba COVID-19 negativa recogida en las 72 horas siguientes a su visita a un negocio cubierto según la orden, que también especifica que los patrones pueden utilizar pruebas de antígeno o PCR.
