Los hombres que vapean tienen un mayor riesgo de disfunción eréctil en comparación con los no vapeadores, según un estudio

Los hombres que consumen cigarrillos electrónicos tienen más del doble de probabilidades de sufrir disfunción eréctil en comparación con los que no vapean, según un estudio publicado el miércoles en la revista American Journal of Preventive Medicine.

En el primer esfuerzo por estudiar la relación entre el vapeo y la salud sexual, los investigadores analizaron los datos autodeclarados de más de 13.000 hombres de 20 años o más encuestados en el estudio nacional Population Assessment of Tobacco and Health Study.

Aquellos que informaron del uso diario de cigarrillos electrónicos eran 2,2 veces más propensos a informar de que tenían disfunción eréctil en comparación con los hombres que nunca habían fumado, independientemente de sus otros factores de riesgo.

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En una muestra más pequeña de hombres menores de 65 años con un IMC normal y sin antecedentes de enfermedades cardiovasculares, la tendencia se mantuvo: los fumadores tenían 2,4 veces más probabilidades de sufrir disfunción eréctil en comparación con los no fumadores.

Aunque algunos pueden considerar el vapeo como una alternativa más saludable a los cigarrillos, consumir nicotina en exceso siempre conllevará riesgos, dijo a Insider el autor principal, el doctor Omar El Shahawy.

"En general, es probable que los cigarrillos electrónicos sean menos perjudiciales que fumar cigarrillos en la medida en que los sustituyen", escribió El Shahawy, profesor adjunto del Departamento de Salud de la Población de la NYU Langone, en un correo electrónico enviado a Insider.

"Los hombres que fuman y quieren cambiar porque el vapeo es menos dañino, deberían intentar limitar su vapeo porque simplemente no está libre de riesgos", añadió.

La disfunción eréctil afecta a uno de cada cinco hombres mayores de 20 años en EE.UU., según la estimación del estudio. Sin embargo, los autores reconocieron que podría haber un sesgo en los datos autodeclarados tanto para las tasas de consumo de tabaco como para la disfunción eréctil.

La encuesta tampoco incluía datos sobre si los encuestados tomaban algún medicamento que pudiera aumentar el riesgo de padecer disfunción eréctil, como los antidepresivos o los betabloqueantes.

Fumar cigarrillos se ha relacionado desde hace tiempo con la disfunción sexual tanto en hombres como en mujeres, potencialmente debido a que la exposición constante a altos niveles de nicotina puede deteriorar la función de los vasos sanguíneos, explicó El Shahawy.

Teniendo en cuenta que muchos e-cigs de nueva generación tienen concentraciones de nicotina especialmente altas, su uso frecuente podría causar un efecto similar.