Una ginecóloga dice que teme ser arrestada por practicar abortos en Indiana

"Te voy a contar cosas, pero no son ciertas".

Es una frase que la Dra. Katie McHugh, ginecóloga de Indiana, utiliza justo después de decirle a una paciente que está embarazada, y antes de compartir información inexacta sobre el embarazo y el aborto.

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En la actualidad, los médicos de Indiana están obligados por ley a decir a cualquier persona que solicite un aborto que el feto puede sentir dolor a las 20 semanas de embarazo, lo cual es médicamente inexacto.

Aunque McHugh matiza su discurso, exigido por la ley, con una advertencia de que lo que va a decir no es un hecho, dice que estas legalidades dificultan que los pacientes la crean.

"Cuando no puedes confiar en las cosas que te dice tu médico, aunque te aclare: 'Estas son las cosas que no son ciertas. El resto de las cosas que te diré son ciertas', es difícil saber qué puedes creer y qué no debes creer", dijo McHugh.

Tras la decisión del Tribunal Supremo de anular el caso Roe contra Wade, que pone la cuestión del acceso al aborto en manos de los legisladores estatales, cada vez son más las prohibiciones del aborto que aparecen en todo el país. En Indiana, el aborto sigue siendo legal hasta las 22 semanas de embarazo, con excepciones en caso de emergencia médica.

Incluso sin una prohibición, los ginecólogos de Indiana han encontrado que los requisitos legales, como los que requieren que un médico dé a los pacientes información médica errónea, son una carga masiva en su trabajo, dijo McHugh a Insider. Ahora que los legisladores de Indiana se reunirán a mediados de julio para una sesión especial en la que probablemente prohibirán el aborto, McHugh, residente de Indiana de toda la vida, está considerando cómo hacer el trabajo que pronto podría ser criminalizado.

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Como proveedora de abortos desde hace ocho años, McHugh ha trabajado bajo varias leyes de Indiana que obligan a los médicos a proporcionar información errónea a las personas que buscan un aborto y, esencialmente, a cometer una negligencia médica.

Ahora, está solicitando ejercer la medicina en estados cercanos como Illinois, donde ya empiezan a llegar en gran número las personas que buscan el aborto en estados más restrictivos.

McHugh dijo que se siente en el deber de atender a las pacientes que buscan un aborto en su estado y no tiene planes de mudarse. En cambio, quiere ayudar a otras residentes de Indiana a conseguir abortos fuera del estado si ya no puede proporcionarlos en el estado sin ser arrestada.

"Es abrumador", dijo McHugh a Insider. "¿Cómo equilibrar el riesgo de cuidar al paciente que tengo delante, como estoy obligado a hacer por mi juramento y por mi brújula moral, con todos los demás pacientes de mi carrera, mi familia, mi libertad y mi autonomía para tomar la decisión de dar prioridad a mí mismo y a mi bienestar?".

McHugh dijo que también se preocupa por las personas embarazadas que no pueden salir de Indiana para abortar debido a cargas profesionales, financieras o de otro tipo, y quiere asegurarse de estar allí para atenderlas.

"Sólo me gustaría poder hacerlo de la manera en que mis conocimientos, mi formación y mi moral me lo permiten", dijo McHugh.