6 consejos para no morderte las uñas

Estos 6 consejos para no morderte las uñas te ayudarán a tener por fin unas manos bonita.

Morderse las uñas es una costumbre tan común en la mayoría de las personas, que ni siquiera lo identificamos como un problema más allá de lo estético. Pero lo que poca gente sabe es que este hábito puede tener consecuencias muy negativas en nuestra salud, creándonos problemas en las manos, los dientes e incluso las encías.

Según han demostrado varios estudios, este hábito suele aparecer en la infancia y es debido a la ansiedad. Los niños que están sometidos a mucho estrés o que sufren cuadros de angustia y ansiedad, convierten el hábito de morderse las uñas en algo habitual dentro de sus vidas. La mayoría de estos niños, mantienen el hábito cuando se hacen mayores, por eso tantos adultos siguen mordiéndose las uñas durante tanto tiempo. Lo que empezó siento una especie de vía de escape de una situación angustiosa, se convierte en una simple manía de la que cada vez es más difícil desprenderse.

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¿Qué problemas puede provocarnos mordernos las uñas?

Lo primero que se ve afectado cuando nos mordemos las uñas habitualmente es la estructura de la misma, ya que cuando las mordemos se producen roturas y se crean diferentes capas que hacen que la uña crezca de forma desigual. También afecta a la hora de coger objetos, ya que unas uñas demasiado cortas puede han que los dedos nos duelan cuando agarremos algo. Uno de las funciones de las uñas es aumentar la adherencia y la precisión a la hora de coger objetos con los dedos, y esto se ve muy limitado cuando nos hemos mordido demasiado las uñas. 

Otro de los grandes problemas de morderse las uñas es cómo esto acaba afectando a nuestros dientes. En la zona del diente con el que nos las mordemos se produce un mayor desgaste y esto puede hacer que se pierda la sensibilidad, incluso parte del esmalte que recubre al diente. Además, podemos desarrolar una maloclusión dental, un problema al masticar, e incluso dolores articulares en la mandíbula debido al esfuerzo que hacemos continuamente para morder. 

Pero no solo los dientes se ven perjudicados. Las uñas acumulan hongos y bacterias a diario, por lo que llevarlos a la boca puede ser una vía fácil para transmitirnos estas bacterias de forma oral. Esto puede dar lugar a infecciones en la boca. 

Después de leer esto, seguro que ya te has concienciado de que morderte las uñas es un problema más importante de lo que parece. Si quieres dejar atrás este hábito, librarte de estos posibles problemas y además, lucir por fin unas manos más bonitas, toma nota de estos seis consejos para ayudarte a dejar de morderte las uñas.

1. Cubre tus uñas con tiritas. Es cierto que no es la solución más estética pero sí puede ser muy eficaz. Si estás en casa y nadie va a ver tus manos, puedes acostumbrarte a llevarlas puestas y así, poco a poco, irás olvidándote de esta fea costumbre. Cambia las tiritas cada cierto tiempo o cuando te duches y, si crees que tus uñas necesitan un descanso para que les de el aire, prueba a quitarlas por las noches, ¡pero no olvides volver a ponerlas por la mañana! Cuando después de unos días las quites y veas cómo de largas y bonitas están tus uñas, querrás dejar de morderlas para siempre. 

2. Deja de morder una uña. Haz el esfuerzo de mantener una uña sin morder. Puedes morder el resto lo que quieras, pero deja que una de ellas crezca. Cuando veas que esa uña está perfecta y que además no te duele, te dará más motivación para dejar de morder el resto. Luego pasa a conservar esa y otra más durante un tiempo. Pasado unos días, añade otra y así sucesivamente. Cuando tengas todas sin morder, habrás completado el proceso.

3. Cambia ese hábito por otro. Cuando te apetezca morderte las uñas, haz otra cosa que igual de inútil pero que al menos no dañe tu salud. Por ejemplo, lleva siempre en el bolsillo una pequeña pelota de goma. Puedes jugar con ella y tocarla cuando te apetezca comerte las uñas. También puedes jugar con cualquier cosa que tengas en tu bolsillo, como monedas o tus llaves de casa. Eso hará que liberes tus nervios y estrés por otra vía y que además rompas con el hábito de la fijación oral. 

4. Realiza pasatiempos que impliquen usar las manos. Dedica tu tiempo libre a actividades como tejer, moldear barro o montar maquetas. Estas actividades requerirán que tus manos estén siempre ocupadas, por lo que no podrás llevártelas a la boca tan fácilmente. Los proyectos que implican que las manos se ensucien son más efectivos ya que evitaremos que nuestras manos toquen la boca mientras estén sucias. 

5. Mantén tu boca ocupada. Si no se te ocurre como ocupar tus manos, ocupa tu boca. Mastica chicles o come caramelos, así tu boca estará ocupara y no necesitará morder otras cosas. También puedes llevar una botella de agua siempre contigo para llevártela a la boca y beber un sorbo cuando te apetezca morderte las uñas. 

6. Aficiónate a la manicura. Comenzar a pintar y cuidar tus uñas también puede ser muy efectivo. Prueba distintos esmaltes y diseños para decorarlas. Esto no solo te mantendrá entretenida y con las manos ocupadas, también hará que te sientas mal si muerdes esa uña que tanto te ha costado decorar.

Sigue alguno de estos 6 consejos para no morderte las uñas y presume de manos nuevas. 

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