'Becoming Eve' es la historia real de una rabina trans. Mira lo que hay detrás de escena.

Emil Weinstein es el dramaturgo de Becoming Eve, que se basa en las memorias de Abby Stein de 2019 con el mismo nombre. La obra sigue su viaje desde ser rabina en una comunidad judía ultraortodoxa hasta convertirse en una mujer trans abierta. Tommy Dorfman interpreta a Chava, el personaje inspirado en Stein. La obra se presentó en marzo y estará en cartelera hasta el 27 de abril en el Abrons Art Center en Nueva York. A continuación, Weinstein habla sobre su colaboración, su pasión por la narración queer y cómo este proyecto coincide con su propia transición.

Cuando mi agente me envió las memorias de Abby Stein, Becoming Eve, en 2020, pensé: 'Conozco a esa rabina'. Ella asiste a la sinagoga con mi mamá en Nueva York. La he visto en YouTube. Sentí que era destino. Pero, al mismo tiempo, teníamos tantas otras conexiones y tantas personas en común que se sintió como la pareja perfecta.

Nos conocimos por primera vez en Zoom en abril de 2020 y desde entonces hemos descubierto que somos como almas gemelas. Esa primera reunión fue Abby queriendo asegurarse de que le gustara y que la vibra fuera buena. Me sentí muy privilegiado de contar su historia y quería hacerlo bien, así que leí las 50 hojas de origen que envió. Hice mi tarea. Luego comencé a escribir borradores de la obra. Creo que después de que leyó el primer borrador, ella se sintió como: 'Tomé la decisión correcta'.

A partir de ahí, la relación se ha profundizado. No teníamos idea de que terminaríamos haciendo clic tan bien. Es un regalo y un desafío crear algo para alguien que amas y admiras, y que reaccione a ello borrador por borrador.

La creadora de ‘Sex and the City’ reveló la historia real detrás de este extraño episodio de Charlotte ¿Qué hay detrás de la foto con más likes de la historia de Instagram?

Creci en el teatro, y tanto mi abuelo como mi madre eran escritores. Cuando obtuve el trabajo, había dirigido cuatro episodios de The L Word: Generation Q. Aunque había escrito un par de musicales y una obra en mi tiempo libre, nunca había sido un dramaturgo profesional y, honestamente, no me consideraba un escritor. Pero a lo largo de este trabajo, me encontré a mí mismo como escritor. Fue genial, interesante y aterrador. Cada vez que trabajo en algo, aprendo mucho sobre ser artista, y me pregunto: '¿Cómo no supe esto?'

Escribir y dirigir son conjuntos de habilidades muy diferentes y realmente me gusta cómo se complementan entre sí. Ha sido asombroso ver la obra en el escenario y los actores son tan buenos. Son mis héroes. Es absolutamente increíble ver a Judy Kuhn, Brandon Uranowitz y Richard Schiff (estoy obsesionado con The West Wing; mi perro lleva su nombre Toby en su honor). Y Tommy Dorfman sostiene la obra y la hace cantar. Ella aporta tanta complejidad y verdad al personaje.

Estoy realmente apasionado por contar historias en las que las personas queer se sientan vistas y representadas con precisión, porque eso es lo que quiero ver. En su mayoría, las personas queer son las más felices del mundo, o lo han sido hasta hace poco. Esa alegría, amor, diversión y comunidad están en el centro de lo que amo de ser queer, así como las cosas difíciles que podemos trabajar y las sombras que podemos procesar.

Siempre quiero celebrar ambos lados con mucho corazón y autenticidad, porque desde ahí vengo como ser humano, y creo que es un lugar del que la mayoría de los seres humanos provienen. Siempre estoy tratando de crear un espacio en mi trabajo donde las personas queer se sientan amadas y vistas.

Dicho esto, Becoming Eve no está necesariamente destinada a una audiencia predominantemente queer, aunque creo que las personas queer se sienten acogidas por ella. Es agradable invitar a personas no LGBTQ+ a este trabajo. Se siente como invitar a nuestros padres a la mesa. Hay personas de la generación boomer que ven la obra y aún confunden los pronombres de nuestro personaje principal después, lo cual es realmente molesto. Pero espero que puedan vernos como personas, y que la próxima vez que alguien diga algo transfóbico a su alrededor, puedan responder: 'Bueno, en realidad, son seres humanos.'

Me encantaría que las audiencias cis vean a una persona en la calle que sea muy diferente de ellos, sientan una profunda empatía e imaginen su vida interior. Espero que las personas trans puedan ver lo valiente y difícil que es lo que hace Chava y reconozcan lo muy fuertes que somos.

La obra se suponía que se abriría en 2024 en el Connelly Theater en Nueva York, que es propiedad de la Iglesia Católica. Nos sacaron. El mundo está tan mal en este momento, y siento que estas conversaciones son realmente cruciales. Mi preocupación son las personas trans en este momento, solo porque la transfobia es tan grave. Se está fomentando para fines políticos de una manera realmente malvada.

La obra me enorgullece de ser judío. Amo ser judío. No amo el patriarcado, pero amo las tradiciones. Creo que, con suerte, hay un espacio para el orgullo que se puede encontrar para las personas trans y para los judíos que ven la obra.

Son Passover en este momento, que, en términos de discutir con nuestras familias, es nuestro Día de Acción de Gracias, y conozco a muchas personas que evitan el conflicto. No tengan miedo de ello. Cualquier cosa que parezca aterradora de hablar necesita ser traída a la luz. Por lo general, hay un paradoja en el centro de ello. Dos cosas opuestas son ciertas al mismo tiempo. La obra se trata de sostener esa paradoja, de ambos lados. Hemos empeorado mucho en eso últimamente.

Las tradiciones judías acercaron a Abby y a mí. Nos conocimos en persona por primera vez cuando ella me invitó a mí y a mi ahora esposa, Alix, a Seder en 2023. Compartimos los mismos valores y ambos estamos obsesionados con el misticismo y la espiritualidad judía. Sentí que conocí a un espíritu afín. Ella ofició nuestra boda el otoño pasado y hizo llorar a todos los mayores. La votaré para presidenta algún día.

Colaborar con Abby ha sido un proceso realmente hermoso, en parte porque hemos estado cambiando y creciendo tanto en los últimos cinco años. Ha sido muy divertido conocernos como personas mientras contamos una historia de crecimiento personal. He transitado de varias maneras a lo largo del proceso: muy literalmente al tomar testosterona; rompiendo con mi padre y su mundo (un tema principal en la obra); y reclamando mi sentido de feminidad, mi sentido de verdad, mi sentido de justicia.

Me he dejado transitar, lo cual fue una decisión realmente difícil para mí, y una que pospuse durante mucho tiempo. He dejado atrás muchos de los patrones obsoletos. También me he convertido en escritor, y gran parte de escribir es despojarse. Así que comencé el proceso de despojo, y ahora me pregunto: '¿Quién soy?'. Estamos averiguándolo.