Biohackea Tu Ánimo Con Un Poco de Movimiento
Es simple, es gratis y las posibilidades son infinitas. Realmente, cualquier forma de movimiento corporal durante un breve período de tiempo, o una sesión larga si la tienes, tiene la capacidad de transformar por completo cómo te sientes en el momento.
Correr, trotar, incluso dar un paseo rápido alrededor de la manzana puede hacer maravillas, pero en realidad, ni siquiera tienes que salir de casa. Pon una canción enérgica y date unos tres minutos para bailar como si nadie te estuviera viendo para cosechar los beneficios.
La ciencia dice que esto se debe a que mejora la circulación al cerebro, lo que afecta nuestra manera de procesar las hormonas del estrés. Lo hace influyendo en el eje hipófiso-suprarrenal (también conocido como eje HPA), mediando los tipos de hormonas de estrés que estamos liberando. Cuando estamos menos estresados, sentimos menos miedo debilitante, lo que juega un papel importante en nuestro estado de ánimo así como en nuestros niveles de motivación.
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Otra razón por la que no tenemos que comprometernos a ejercicios largos e intensos para activar nuestros sensores de felicidad es porque todo lo que necesitamos es suficiente movimiento para elevar nuestra frecuencia cardíaca y aumentar la producción de dopamina, norepinefrina y serotonina: hormonas asociadas con la alegría y la relajación. El movimiento también potencia nuestras endorfinas, lo que nos proporciona energía sostenible durante el día y mitiga las respuestas al dolor tanto físico como emocional.
Cuando estamos muy estresados, nuestros cuerpos liberan un exceso de una hormona del estrés llamada cortisol. Tener demasiado cortisol desajusta nuestro delicado sistema hormonal, y ahí es cuando problemas como brotes de acné, problemas de sueño, mala digestión y aumento de peso pueden aparecer. Por eso es tan importante estar a solas con nosotros mismos y ser conscientes, evaluando nuestro estado de ánimo y haciendo lo que esté a nuestro alcance para alcanzar un nivel cómodo. Considera esto parte de nuestra rutina de belleza.
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Cuando hacemos un entrenamiento intensivo cuando ya estamos muy estresados, puede empeorar el problema (los entrenamientos de alta intensidad pueden aumentar realmente los niveles de cortisol), pero pequeños estallidos de movimiento o incluso algo más suave, como el yoga, pueden transformar cómo nos sentimos y la manera en que funcionan nuestros sistemas intrincados.
La próxima vez que te sientas agitado, enojado, sin motivación o simplemente en desesperación, pon una canción de baile que te de vergüenza en tus auriculares y ¡muévete! Agita, practica twerking frente al espejo, sal a caminar, haz estiramientos dinámicos, o respira a través de lo que tengas tiempo para hacer. ¡Puede que solo necesites 10 jumping jacks! Un poco de movimientos desestructurados. Simplemente sacude la energía estancada y propúlsate hacia adelante.
