El bótox ya se puede comprar y pagar más tarde

Natalie sabía que si no recibía su paga extra, no podría pagar el relleno de pómulos que quería. En un centro médico de Indiana, su estado natal, le habían ofrecido 2.160 dólares por dos tratamientos con Voluma, utilizando tres jeringas en total. "Que quede claro: ese precio no habría salido de mi cuenta corriente en aquel momento", afirma. Pero entonces quería el relleno para sentirse más ella misma, y lo quería de inmediato. "Engordé más de 9 kilos en muy poco tiempo debido a un problema de tiroides", explica. Después de perder más de 10 kilos en tres meses, sus mejillas y su cara parecían muy hundidas. "En lugar de sentirme mejor, tenía la sensación de haber envejecido varios años y parecía agotada constantemente", recuerda. "Todo es vanidad, claro, pero mi aspecto exterior no se correspondía con cómo me sentía por dentro: joven, extrovertida y descansada". Así que reservó las citas y las cargó a su tarjeta de crédito personal. Afortunadamente, la bonificación del trabajo llegó y pudo pagarla.

Pero, ¿y si no necesitara el dinero por adelantado? En los últimos años se ha disparado el uso de los métodos de "compra ahora y paga después", con empresas como Affirm y Klarna a la cabeza. Pero aunque estos servicios pueden facilitar, por ejemplo, el pago de un par de zapatos de diseño en cuotas mensuales, no han llegado al mundo de la estética. Ahí es donde PRIVI, que se lanzó en junio de 2023, espera encontrar su mercado.

Cada vez son más las personas que se someten a procedimientos estéticos -en una encuesta realizada en 2022 por la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos, el 76% de los cirujanos plásticos declararon haber observado un aumento de la demanda en comparación con los niveles anteriores a la pandemia-, pero estos costosos tratamientos aún están lejos de democratizarse. "El coste sigue siendo la mayor barrera para satisfacer el interés y la demanda de tratamientos estéticos y de retratamiento. De hecho, el 74% de los pacientes dicen que el coste es la razón número uno por la que no siguen adelante con el tratamiento", dice Todd Watts, CEO de PatientFi, la empresa matriz de PRIVI. (Esta cifra se basa en una encuesta realizada en 2023 por PatientFi, que es superior al 71% de pacientes que dijeron que el coste es la mayor barrera para seguir adelante con el tratamiento según un Informe de Tendencias de Estética de RealSelf de 2019).

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PRIVI trabaja para cerrar esta brecha financiera, haciendo más accesibles los servicios y tratamientos al tomar el coste total de un plan de tratamiento y dividirlo en pagos mensuales. La idea es que tanto los pacientes como los proveedores médicos salgan ganando: Los pacientes pueden obtener los servicios que desean ahora y disponer de un plan de varios tratamientos si es necesario; los proveedores pueden retener a los pacientes y mantenerlos contentos. En lugar de ofrecer un plan de tratamiento de dos jeringas de relleno por 1.500 $, los inyectores pueden ofrecer el mismo tratamiento por 125 $ al mes durante 24 meses. (PRIVI no cobra intereses mensuales).

Aunque esto puede resultar útil para algunos, otros se muestran un poco escépticos a la hora de utilizar una opción de pago aplazado. "Creo que puede volverse peligroso muy rápidamente", dice Natalie, que pidió que la identificáramos sólo por su nombre de pila. "Tiene dos vertientes, porque da a todo el mundo la opción de 'permitírselo', pero ¿animará a tu inyector a sugerirte más tratamientos, más unidades, más productos que no son necesarios?". El Dr. Ben Paul, cirujano plástico con doble titulación en la ciudad de Nueva York, no utiliza actualmente planes de pago o, al menos, no los ofrece de forma proactiva (en su consulta sí se aceptan tarjetas de crédito). "Un plan de pago puede abrir la puerta a la cirugía plástica a alguien que de otro modo no podría permitirse una intervención", dice el Dr. Paul. "[Pero] al mismo tiempo, un plan de pago puede crear una situación en la que un paciente se endeude por una cirugía plástica electiva". (Los programas "Compre ahora, pague después" han sido "criticados por crear una "deuda fantasma" y facilitar que los consumidores gasten más de la cuenta, sobre todo los que ya son "financieramente frágiles". Aunque no pagues intereses, la deuda del BNPL podría afectar a tu puntuación crediticia).

Hablando de cirugía plástica, PatientFi existe desde 2017 y ofrece financiación para aumentos de pecho, liposucción y similares. No fue hasta el lanzamiento de PRIVI el año pasado que los tratamientos estéticos como Botox y microneedling fueron elegibles para la financiación. Dado que el seguro puede cubrir algunas cirugías plásticas, el pago es un poco más complicado. Lucy, una veinteañera residente en Dallas, llevaba años pensando en una reducción de pecho antes de hablar con un cirujano. Fue entonces cuando se enteró de que, aunque las reducciones de pecho pueden estar cubiertas por el seguro, los requisitos suelen ser muy estrictos. (Según una revisión estadística de 2023, las tasas de denegación de la cirugía de reducción mamaria oscilan entre el 21% y el 62% para las aseguradoras privadas). Lucy, que nos pidió que la identificáramos por su nombre de pila, fue una de las afortunadas a las que aprobaron la operación desde el principio: Su seguro cubrió el 80% de la operación. "Pagué el 20% de mi bolsillo, lo que equivalía a unos 3.000 dólares", dice. "Y pagué los honorarios del hospital, que fueron unos 1.000 dólares".

Lucy utilizó CareCredit para estos gastos, una tarjeta de crédito para procedimientos de salud y bienestar. Ofrece un tipo de interés variable en función de tu puntuación crediticia y se acepta en más de 260.000 establecimientos, incluidos especialistas médicos y consultas dentales. "Pagué el 20% de mi cirugía en seis meses a través de CareCredit con interés cero, que fue la opción de plan de pago que me recomendó la consulta de mi cirujano", dice Lucy. "Si hubiera tardado más de seis meses, habría incurrido en un alto tipo de interés sobre la deuda". (La TAE, o tasa anual equivalente, de CareCredit ronda el 29,99% tras el periodo sin intereses, pero puede ser diferente en función de la puntuación crediticia de la persona y otros factores financieros). Más allá de una TAE elevada, los posibles pacientes deben comprender los riesgos financieros inherentes al retraso en los pagos. Según una encuesta realizada por Lending Tree, actualmente el 8% de los que tienen deudas "médicas" dicen que las cirugías o procedimientos estéticos fueron los únicos culpables.

PRIVI señala que el importe máximo por transacción de tratamiento estético está limitado a 5.000 dólares, pero el gasto total anual puede ser varias veces superior. Desde su lanzamiento, un total de 6.750 miembros se han inscrito en PRIVI y se han realizado más de 1.860 transacciones, lo que ha supuesto más de 1,3 millones de dólares en tratamientos financiados hasta la fecha. En caso de impago, el paciente no podrá recibir el siguiente tratamiento hasta que se ponga al día en los pagos mensuales adeudados. Algunos usuarios, en función de su situación financiera, pueden pagar una cuota única para cubrir el coste de su primer tratamiento y, a continuación, abonar una cuota mensual reducida durante el resto del año. Estos pacientes también pueden beneficiarse de la función Beauty Bank de PRIVI, que les permite "depositar fondos en un proveedor y acudir a tratarse cuando estén preparados", explica Watts.

Una forma útil de mantener a raya las preocupaciones (económicas) es asegurarse de comprender desde el principio el cuadro financiero completo de la intervención. El Dr. Ramtin Kassir, cirujano plástico facial y reconstructivo con triple titulación que ejerce en Nueva York y Ridgewood (Nueva Jersey), recomienda solicitar presupuestos detallados de la intervención o el tratamiento. "Éste debe incluir no sólo los honorarios de la intervención quirúrgica o el tratamiento, sino también cualquier gasto adicional, como anestesia, honorarios del centro, cuidados postoperatorios y citas de seguimiento", dice. Lucy admite que no sabía que tendría que pagar una cuota hospitalaria, y "como recién licenciada con fondos limitados, este gasto inesperado fue estresante para mí y algo que desearía haber sabido de antemano", dice. "La tarifa del hospital era totalmente independiente de la tarifa de la cirugía y el hospital no ofrecía ningún tipo de plan de pago, así que tuve que pagar el gasto de golpe y muy rápido". A veces, las consultas tienen un coste y luego ese coste puede utilizarse para el procedimiento, pero eso depende del proveedor.

Para evitar preocupaciones económicas por los tratamientos estéticos, la mejor respuesta puede ser retrasar la gratificación en lugar de aplazar los pagos. "Pregunto el coste por adelantado y si voy a una consulta nueva y empiezan a examinarme la cara diciéndome qué [más] necesito, diré: 'Esperaré hasta la próxima vez' y me limitaré a hacer lo que vine a hacer", dice Loreen Hwang, creadora de contenidos afincada en Los Ángeles, que se ha sometido a tratamientos de "Barbie Botox", microneedling y láser.

Si estás decidida a someterte a un procedimiento, como en cualquier otra cosa, asegúrate de tener un plan para cubrir los costes a lo largo del tiempo. Por supuesto, "la forma más económica de pagar procedimientos de belleza electivos es ahorrar por adelantado y pagarlos por adelantado", dice Kimberly Palmer, experta en finanzas personales de NerdWallet y autora de Generation Earn. Puede que endeudarse para someterse a una intervención no esté en tu cartón de bingo, pero podría ocurrir.

"La cirugía plástica y los tratamientos estéticos, cuando se hacen correctamente, son fantásticos y a menudo cambian la vida", dice el Dr. Kassir. "Así que si eso se puede facilitar con cualquier tipo de plan de pago, es una gran ventaja, siempre que el paciente entienda las obligaciones de los planes de pago igual que lo hace con sus tarjetas de crédito".