¿Eres culpable de aplazar la hora de acostarte por venganza?
No hay nada que hagamos mejor que vengarnos (procrastinación a la hora de dormir).
Después de un largo día lleno de responsabilidades, irse a la cama a una "hora razonable" parece injusto. Así que nos tumbamos en la cama, navegando sin parar por las redes sociales hasta la madrugada, cuando por fin sucumbimos al sueño. Al día siguiente nos despertamos preguntándonos por qué no nos fuimos a la cama.
Aclarar. Repetir.
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Sí, a veces irse a la cama parece una pesadilla. La procrastinación vengativa a la hora de acostarse es la acción de realizar una actividad que no es necesaria en lugar de irse a la cama a una hora saludable. Ashley Neese, reputada profesora de respiración, practicante somática y autora del libro Permission to Rest (Permiso para descansar), dice que hay un método detrás de la locura de este fenómeno de medianoche.
"A menudo, la gente procrastina a la hora de acostarse debido a la ansiedad y el estrés, porque no tienen una buena rutina de relajación y se sienten demasiado excitados para dormir, o porque no han tenido suficiente tiempo personal durante el día." Ashley explica que la procrastinación vengativa a la hora de dormir es cualquier actividad que retrase el sueño. Las más comunes son navegar por las redes sociales, ver la televisión, pasar el rato en Internet, comer y jugar a videojuegos.
Puede que no parezca que quedarse despierto cada noche para ver un episodio más de tu nueva serie favorita sea un gran problema, pero sí lo es. "Con el tiempo, la falta de sueño adecuado se asocia a pensamientos poco claros, atención fragmentada, problemas de memoria, dificultad para tomar decisiones, sensación de irritabilidad y aumento de la ansiedad y el estrés", afirma.
Aunque todo el mundo es susceptible de procrastinar un poco la hora de acostarse por venganza, según Ashley, este rasgo es más común en las personas que tienen dificultades con el TDAH y la autorregulación.
Aunque no cree que procrastinar a la hora de dormir sea bueno para nadie, Ashley sí ve un posible beneficio. "Puede indicarte áreas de tu vida en las que te falta algo o necesitas apoyo", dice. "Por ejemplo, si te atiborras de autocuidado por la noche, intenta llamar a un amigo, tomarte un descanso o realizar otra actividad breve y nutritiva durante el día, para sentirte más satisfecho al final de la jornada".
Procrastinar la venganza a la hora de dormir puede ser un hábito difícil de romper, pero según Ashley, se trata de tratar la causa, no el síntoma. "Es importante llegar a la raíz de por qué eliges quedarte despierto en lugar de satisfacer la necesidad de sueño de tu cuerpo", afirma.
Ashley comparte algunas medidas prácticas para empezar.
- Practica ejercicios de eficacia probada, como la respiración o el yoga reconstituyente, para relajarte antes de acostarte.
- Comprométete a no mirar la luz azul un par de horas antes de acostarte, ya que está demostrado que altera nuestro ritmo circadiano.
- Evita la cafeína a última hora del día para dar tiempo al cuerpo a relajarse.
- Guarda tus dispositivos para no caer en la tentación de consultar un correo electrónico más o una publicación en las redes sociales antes de acostarte.
Y lo que es más importante, aconseja crear un ritual antes de acostarse, "para que tu cuerpo pueda entrar en un ritmo familiar por la noche y procesar emociones como la ira o la pena durante el día para evitar que te abrumen cuando llegue la hora de dormir."
