Los ingredientes ecológicos también están ganando popularidad en cosmética
En la actualidad se utiliza una amplia gama de ingredientes naturales en los productos cosméticos y de cuidado personal. Los aceites vegetales, las grasas y las mantecas están muy arraigados, pero muchos ingredientes funcionales, como los tensioactivos, los emolientes y los espesantes, se fabrican ahora con materias primas naturales. La tendencia es que los operadores se abastezcan éticamente de materias primas de origen natural.
Aceites vegetales sostenibles
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El aceite de palmiste es el aceite vegetal más utilizado en la industria cosmética. En la actualidad, cerca del 20% del aceite de palma se produce de acuerdo con la RSPO o sistemas de sostenibilidad relacionados. Las grandes empresas de cosméticos, como Unilever y L'Oréal, se han comprometido a abastecerse únicamente de aceite de palma sostenible. Más de 20 operadores se han unido a la Acción para los Derivados Sostenibles, una colaboración dirigida por la industria que fomenta la producción y el abastecimiento responsable de los derivados del aceite de palma.
El número de cartas de sostenibilidad y sistemas de certificación de aceites vegetales va en aumento. La Sustainable Coconut & Coconut Oil Roundtable presentó su primera carta en 2020. Desde 2016 existe un sistema similar para el aceite de ricino sostenible. Croda adoptó recientemente la certificación ISCC Plus para mostrar la transparencia y la trazabilidad en sus cadenas de suministro de aceite vegetal.
Ingredientes ecológicos
Los ingredientes ecológicos también están ganando popularidad. Esta tendencia se debe en parte al éxito de los principales sistemas de certificación COSMOS y Natrue. En la actualidad, casi 40.000 productos cosméticos están certificados según estas normas. Lanzados inicialmente en Europa, los sistemas de certificación se han extendido a Asia-Pacífico y América.
Los proveedores de materias primas agrícolas están adoptandonormas de comercio justo. El aceite de coco, el aceite de oliva, la manteca de karité, el cacao, el árbol del té y los aceites esenciales son algunos de los ingredientes certificados que se están introduciendo en los productos cosméticos y de cuidado personal. Las empresas de cosméticos están poniendo el sello de Comercio Justo en los productos que contienen estos ingredientes.
Algunos sistemas de certificación están traspasando el ámbito de la industria alimentaria. La marca de la Vegan Society, lanzada inicialmente en 1990 para productos alimentarios veganos, cuenta ahora con más de 24.000 productos cosméticos certificados. The Body Shop es uno de sus mayores defensores y ha declarado que todos sus productos estarán certificados para finales de 2023.
En Estados Unidos, el sistema de certificación Non-GMO Project Verified es el que más rápido crece. Este sistema, introducido inicialmente para los productos alimentarios, ha sido adoptado por casi 70 marcas de cosméticos y cuidado personal. En Asia, la etiqueta Halal es cada vez más evidente. Es más popular en Indonesia, donde el gobierno introdujo el año pasado el etiquetado halal obligatorio para los cosméticos.
Ecovia Intelligence espera que el número de programas y normas de sostenibilidad siga creciendo. El creciente uso de materias primas naturales presiona a las empresas de cosméticos e ingredientes para que se abastezcan de forma ética y adopten la vía de la certificación. Algunos operadores optarán por la agricultura ecológica, el comercio justo o los sistemas de sostenibilidad como la RSPO para demostrar que cumplen con altos estándares medioambientales y sociales. Otros se centrarán en la trazabilidad para demostrar que sus materias primas están libres de deforestación, no tienen transgénicos, son veganas y/o halal. Sea cual sea la dirección que tomen, el abastecimiento ético se está convirtiendo en un elemento permanente de la industria cosmética.
