Por qué el uso del aire acondicionado puede ser sexista

¿Es sexista el uso del aire acondicionado en la oficina? Esta teoría afirma que sí.

Si trabajas en una oficina, seguro que también te has visto llevando una rebeca al trabajo en los meses de más calor. Los que no están en tu puesto de trabajo no entenderán nada, pero las mujeres que estén en un puesto similar seguro que se sienten identificadas contigo. La temperatura a la que suelen poner el aire acondicionado en cuanto se acerca el verano es tan baja que a menudo necesitamos abrigarnos con algo para evitar un resfriado.

Tú ya estás acostumbrada a esto pero ¿algún hombre de tu oficina tiene el mismo problema? No se trata de roles de género, si no de la propia naturaleza. La temperatura corporal de cada persona depende de muchos factores, pero el género influye. La temperatura corporal de las mujeres suele ser entre dos y tres grados más baja que la de los hombres, la diferentes suficiente para que la temperatura del aire acondicionado sea agradable para ellos y nos haga pasar frío a nosotras. Evidentemente, como ocurre en todo, hay excepciones pero, por lo general, son las mujeres las que pasan frío en la oficina.

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¿Por qué ocurre esto? Según publicó un estudio, esto ocurre porque son los hombres los que suelen elegir la temperatura del aire acondicionado en los puestos de trabajo, convirtiendo así su uso en un problema sexista. Probablemente, esto venga del hecho de que en las oficinas grandes en las que existe este problema, la mayoría de los trabajadores con un alto cargo y, por lo tanto, con la capacidad de tomar decisiones, son hombres.

Cuando la candidata a gobernadora de Nueva York Cynthia Nixon pidió en un debate que se estableciera una temperatura fija de unos 24 grados en las oficinas par evitar “una refrigeración sexista”, mujeres de todo el mundo abrieron los ojos ante el problema que estaban sufriendo y comenzaron a pedir lo mismo en sus oficinas.

Además de ser un problema que afecta principalmente a las mujeres, el uso excesivo del aire acondicionado en el trabajo es la primera causa de los resfriados que se dan en la época de verano según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, así que tampoco es nada descabellado hacer una ley para fijar el aire acondicionado en una temperatura que sea agradable para todo el mundo y a la vez no ponga en peligro nuestra salud, tal como proponía la candidata Nixon.

Si tú también has tenido este problema en tu trabajo y te han hecho sentir que estabas loque o que eras una exagerada, tranquila, no lo eres. La temperatura de las mujeres varía según el momento del ciclo en el que esté, según su tasa metabólica, la cual es menor que la de los hombres o según cómo gestiona tu cuerpo la sudoración. En resumen, es algo científico que tú tengas más frío que tus compañeros, y no deberías pedir perdón por ello.

¿Se solucionará alguna vez este uso sexista del aire acondicionado en las oficinas?