¿Te sientes estancado? Este podría ser el consejo directo que necesitas
¿Alguna vez te has encontrado diciendo cosas como:
- “Me encantaría, pero no soy el tipo de persona que puede hacer eso.”
- “Es más difícil para mí debido a mi pasado.”
- “Eso funciona para otras personas, pero mi situación es diferente.”
Puedes pensar que estás explicando tu realidad. Pero aquí está la dura verdad: Cuando luchas por tus limitaciones, las mantienes.
No es solo una frase pegajosa. Es neurociencia. Y es una de las razones más grandes por las que las personas permanecen estancadas, incluso cuando trabajan duro para cambiar.
Esto es lo que necesitas saber para ir a un concierto de K-Pop Así reaccionó esta reportera al descubrir que la víctima de la noticia que estaba dando era amiga suya
Tu cerebro tiene algo llamado sistema reticular activador (RAS). Es como un filtro que te ayuda a concentrarte en lo que importa e ignorar el resto. Pero aquí está el truco: Tu RAS no decide qué es importante, tú lo haces.
Cuando te cuentas una historia como: “No puedo tener éxito porque no soy lo suficientemente bueno,” tu RAS trabaja para demostrar que estás en lo correcto. Destaca cada error, cada obstáculo y cada momento de duda. Y filtra las oportunidades o evidencias que podrían desafiar esa creencia.
En otras palabras, tu cerebro luchará por la historia que le das, incluso si esa historia te mantiene estancado. Cada vez que dices estas cosas, las refuerzas. Las estás conectando más profundamente en tu mente subconsciente. Y dado que el subconsciente impulsa el 95% de tus decisiones, esas excusas se convierten en profecías autocumplidas.
Esta es la razón por la que “pensar en positivo” a menudo no funciona. No puedes superar una creencia que está profundamente arraigada en tu subconsciente. Pero aquí están las buenas noticias: Así como las creencias limitantes pueden estar cableadas en tu cerebro, también puedes reprogramarlas.
Aquí hay cinco consejos para reprogramar tu cerebro:
P presta atención a frases como: “No puedo porque ...” o “Es más difícil para mí.” Escríbelas y nota cuáles historias surgen una y otra vez. La conciencia es el primer paso para entender qué historias te están limitando.
Por cada limitación que hayas identificado, pregúntate: “¿Esto es siempre cierto?” Busca evidencia que contradiga la creencia. Tu RAS comenzará a notar nuevas oportunidades cuando desafíes viejos patrones.
En lugar de intentar convencerte lógicamente para cambiar, pregúntate: “¿Qué emoción impulsa esta creencia?” Trabaja para liberar el miedo, la culpa o la tristeza asociada a ella. Los cambios emocionales conducen a cambios de comportamiento duraderos.
Toma una creencia que has estado sosteniendo, y reencuádralo emocionalmente. Por ejemplo, si piensas: “No puedo hacer esto porque no soy suficiente,” abraza la emoción opuesta. En este caso, es capacidad. Cierra los ojos y visualiza un incidente en particular donde te sentiste capaz.
Ahora, siente esa sensación de nuevo. Siente cómo corre a través de tu cuerpo y "ancla" esa sensación presionando tu pulgar y dedo índice juntos durante unos segundos mientras sientes esa emoción. Cada vez que sientas esa emoción limitante, usa tu "ancla" y la sensación de capacidad volverá a invadir tu cuerpo.
Elige una creencia limitante y comprométete a re-emocionarla a diario. Con el tiempo, tu cerebro adoptará naturalmente la nueva creencia, y alinear tus acciones con ella se sentirá sin esfuerzo.
Al trabajar con tus emociones en lugar de contra ellas, puedes reprogramar tu mente para oportunidades y éxito. No se trata de luchar más duro, se trata de luchar de manera más inteligente.
