‘Virginia Giuffre fue amable, reflexiva y una auténtica badass’

Cuando se enteró de la noticia de la muerte de Virginia Giuffre por suicidio a la edad de 41 años, la autora y activista Joeli Brearley se sintió devastada.

En 2021, Giuffre demandó al Príncipe Andrew, acusándolo de abusar sexualmente de ella en la casa de Jeffrey Epstein en Nueva York, así como en otros lugares, en 2001, cuando era menor de 18 años. El príncipe, que negó todas las acusaciones en su contra, llegó a un acuerdo fuera de los tribunales con Virginia en 2022.

‘Una o dos semanas después de que terminó el caso, la contacté en las redes sociales,’ dice Joeli. “Fue por varias razones. En primer lugar, realmente quería que supiera el impacto que su caso tuvo en las mujeres británicas. Quizás ella lo sabía, pensé, pero quería estar segura de ello. Durante el juicio, se podía ver lo brutal que fue para ella; la vergüenza pública, el escrutinio, el repaso de las partes más dolorosas de su vida. Y todo el tiempo fue madre con una familia.”

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Virginia dejó atrás a tres hijos, dos niños y una niña de 19, 16 y 15 años, que tuvo con su esposo Robert Guiffre (la pareja se había separado en 2023).

‘La otra razón por la que quería contactarla y mostrarle mi apoyo era porque en ese momento era directora ejecutiva de la organización benéfica Pregnant Then Screwed (PTS), que lucha contra la discriminación por maternidad,’ dice Joeli. ‘Estábamos justo en medio de una campaña sobre Acuerdos de Confidencialidad y hablábamos con cientos de mujeres que habían sido silenciadas por ellos. Habían soportado un trato injusto, en algunos casos acoso y bullying, y estaban prohibidas de hablar sobre ello públicamente. Y luego tenías a Virginia Giuffre, que había soportado todo lo que había, y se estaba enfrentando a algunas de las personas más poderosas del mundo, que solo querían silenciarla. A pesar de esto, ella era tan desafiante.

‘Nunca esperé que respondiera, pero lo hizo, diciendo lo agradecida que estaba de que me hubiera tomado el tiempo de enviarle un correo. Fue amable y apoyó nuestro trabajo en PTS, y de forma increíble dijo que desearía haber tenido a alguien como yo a su lado. Recuerdo haber pensado, es al revés, desearía que tú estuvieras en mi esquina. Ella acababa de pasar por este brutal caso, sin embargo, estaba interesada en el trabajo que estábamos realizando y era tan generosa y amable. Recuerdo haber pensado, ¿cómo puedes ser una badass y una persona encantadora y reflexiva al mismo tiempo?

Se ha informado que Virginia, nacida en EE. UU., fue abusada por un amigo de la familia a la edad de siete años. En su adolescencia, huyó de casa y a los 16 años se encontró trabajando en Mar-a-Lago, el resort de Florida de Donald Trump. Allí conoció a Ghislaine Maxwell, quien trabajaba para el difunto millonario Jeffrey Epstein, quien murió en la cárcel en 2019 mientras esperaba juicio por cargos de tráfico sexual. En 2021, Giuffre le dijo a la revista New York que todavía tenía pesadillas sobre Epstein abusando de ella, diciendo: ‘Siempre me despierto deseando no tener que vivir tanto en el pasado.’

Días después de su muerte, la cuñada de Virginia, Amanda Roberts, dijo a los periodistas: “Perdimos a nuestra hermana. Sus hijos perdieron a su madre y su madre perdió a su hija. Así estamos ahora. Ella era una de las almas más hermosas que alguna vez tendrías la oportunidad de conocer. Pero creo que a veces, esa carga y ese peso se vuelven demasiado difíciles de llevar.”

En marzo de este año, Virginia publicó una fotografía de ella con moretones en el hospital, escribiendo que sus médicos le habían ‘dado cuatro días de vida’ y ‘estoy lista para irme, solo que no hasta ver a mis bebés una última vez.’ Lady Victoria Hervey, una exnovia del Príncipe Andrew, volvió a publicar la foto con la palabra ‘karma’. [La familia de Virginia más tarde afirmó que ella había tenido la intención de publicarla solo en su cuenta privada de Facebook, después de que se afirmó que el accidente fue menor y que estaba en medio de una amarga batalla por la custodia con su ex esposo].

‘Lo vemos una y otra vez cuando las mujeres hablan,’ dice Joeli. ‘La sociedad espera que cometan un error de alguna manera para poder decir, “sabíamos que eras imperfecta, sabíamos que estabas mintiendo.” Tenemos que encontrar los defectos y las grietas en las víctimas, como prueba de que estaban mintiendo. No podemos permitir que las mujeres sean víctimas y héroes, siendo también imperfectas. Tenemos que retratarlas como un desastre. Pero soportar lo que ella soportó y luchar con tanta fuerza por sí misma y por otras mujeres, Virginia no era nada menos que eso.’

O como lo puso su cuñada, ‘El mundo ha perdido a una guerrera feroz. Ella deseaba que todos los sobrevivientes obtuvieran justicia. Eso es quien era ella.’