Cómo tener mejores límites
Imagínate esto: llegas a casa después del entrenamiento de fútbol más tarde de lo esperado y estás abrumado con la tarea de HW *y* ayudando a tu madre a limpiar después de la cena. ¿Abrumado? Eso sería un eufemismo. Pero cuando tu amiga te manda un mensaje de texto rogándote (como 10 mensajes seguidos...) que le ayudes a diseccionar el texto que recibió de su enamorado, te sientes mal diciendo que no. Así que acabas sacrificando tu nota en el examen (y tu horario de sueño) para ayudar a tu chica.
No hay duda de que hacer sacrificios por los que nos importan es superimportante, pero también es igual de importante convertirse en tu *propio* mejor amigo. ¿Y el comienzo para mostrarse más amable? Estableciendo mejores límites. Desde aprender a decir "no" hasta no asumir compromisos adicionales, he aquí cómo hacerlo.
Decir "no"
Límites frente a ultimátums Los mitos más comunes sobre los límites
Decir que no no es de mala educación, es una habilidad importante en la vida. Tanto si se trata de rechazar una invitación a una fiesta después de una larga semana de estudio para los exámenes finales como de decir que no a quedarse después de clase para dar clases particulares cuando hacer tus propios deberes te parece mucho, ponerte a ti mismo en primer lugar es algo que *todos* tenemos que hacer en algún momento. Y aunque puede ser duro, puede ayudarte de verdad a largo plazo.
Aleja a las personas tóxicas de tu vida
Lamentablemente, hay que cortar con las personas tóxicas de vez en cuando. Si te has dado cuenta de que uno de tus amigos te deprime constantemente o te hace sentir mal contigo mismo, intenta tener una conversación con él. ¿Y si intentan restarle importancia a tus sentimientos? Eso podría ser una señal para pasar a otros amigos.
Tómate un tiempo para ti
Esta es tu señal para empezar a poner tu teléfono en "no molestar", darte un baño de burbujas y relajarte al menos una vez a la semana. ¿Porque la mejor manera de tener límites? No dejar que el mundo exterior se entrometa en tu zen.
Poner tu salud mental en primer lugar
Poner tu salud mental en primer lugar es un *deber*. Tu salud mental es algo que merece tanto cariño como el resto de tu salud, así que es hora de empezar a actuar como tal. Ya sea que esto signifique rechazar un compromiso extra para tu periódico escolar durante una semana de exámenes o pedir ayuda en un proyecto de grupo que de repente parece que estás haciendo solo, asegúrate de sintonizar con tus sentimientos y actuar sobre ellos.
