Cuidar de los niños es más duro que trabajar en una oficina, según este estudio

Un estudio demuestra que quedarse en casa cuidando de los niños es un trabajo más duro que el de acudir cada día a una oficina.

Si estás leyendo esto y tú también eres o has sido una de esas madres que ha decidido aparcar su carrera profesional para encargarte del cuidado de tus hijos durante sus primeros años de vida, estarás pensando que esta noticia no dice nada nuevo para ti. Pero, para los que nunca estuvieron en esta situación, parece que este estudio ha supuesto toda una sorpresa.

A menudo se piensa que las madres o padres que deciden quedarse en casa para cuidar de los hijos que “no hacen nada” o que “son mantenidos por sus parejas”, cuando la realidad es que el trabajo de quedarse en casa es realmente duro. No solo no tiene ni un solo día o rato de descanso, si no que es una gran responsabilidad y un esfuerzo físico importante.

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Este estudio fue realizado en el Reino Unido por la marca de productos para la piel AVEENO Baby. En él participaron 1.500 padres que ofrecieron distintos datos y opiniones sobre la crianza y sobre trabajar fuera de casa. Al comparar los resultados y analizarlos, los encuestadores concluyeron que el 55% de las parejas pensaba que quedarse en casa con el bebé es más difícil y duro que una jornada completa en una oficina.

Con las respuestas obtenidas de una larga encuesta, los investigadores aprovecharon para abordar otras cuestiones y arrojar otros resultados sobre la crianza, el trabajo dentro y fuera de casa y la maternidad. Uno de estos datos curiosos fue que solo un 20% de las parejas confesó que la maternidad y la paternidad era una tarea “muy compleja”, mientras que hubo un 48% que la definió como “un camino perfecto”.

Otro de los temas de los que hablaron con estas parejas con hijos fue de algo tan actual como las redes sociales. Este fenómeno está influyendo en la forma en la que vivimos nuestro día a día y, por lo tanto, también lo hace en cuestiones como la maternidad y la paternidad. Según el estudio, un 21% de los padres y madres se sienten más presionados en la crianza de sus hijos debido a las publicaciones de Instagram, Facebook y Twitter de otros padres.

Y es que, en las redes sociales, la gente tiende a mostrar la parte perfecta de sus vidas, omitiendo los problemas del día a día que, por ejemplo, pueden surgir en la crianza de los niños. Por eso es peligroso compararnos con las publicaciones de otras madres y padres, ya que no todo lo que vemos es real o, al menos, no es una realidad total. Sin embargo, cada vez son más las madres que están publicando una cara más honesta de la maternidad con el fin de ayudar a otras madres a que no se sientan solas ante problemas que son completamente normales.

Volviendo al tema del estudio, y ahora que se ha confirmado que quedarse en casa con los niños es más duro que ir a la oficina, esperamos que las madres y padres que toman esta opción empiecen a ser más valorados por la sociedad.