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La evolución de los tatuajes con el paso del tiempo

MODAS QUE NO DEBERÍAN DURAR PARA SIEMPRE EN TU PIEL

Los tatuajes son un tipo de arte que ha sido adorado y odiado por todas las personas del mundo alguna vez. Han existido tatuajes casi desde que la humanidad se agrupa y forma sociedades. Los antiguos egipcios tenían tatuajes, al igual que muchos nativos de tierras exóticas en un pasado muy lejano.

Aunque hay muchas razones diferentes por las que la gente se tatúa y otras tantas por las que elige los diseños que hace, parece haber cierta correlación entre las elecciones que se hacen y la década en la que la persona vive y los principales acontecimientos mundiales que se producen. Parece que hay algunos diseños de tatuajes que hablan de una generación y se convierten en tendencias, las mismas que en algún momento desaparecen, causando el deseo de no haberlo hecho nunca, irónico para un tatuaje... Si este es vuestro deseo, os dejamos una recomendación para eliminar tatuajes en Barcelona.

Tatuajes de principios del siglo XX

A principios del siglo XX, los tatuajes todavía se consideraban algo que sólo se hacían los marineros, los delincuentes o los artistas de circo. Teniendo en cuenta esto, no es de extrañar que las tendencias de los tatuajes desde el año 1900 hasta la década de 1920 consistieron en diseños náuticos, patrióticos y religiosos. Había muchas anclas, cruces y sellos de regimiento que se veían en aquellos valientes que elegían llevar tatuajes. La sociedad seguía desaprobando la práctica de los tatuajes y a aquellos que decidían hacérselos. De hecho, muchos de los miembros de la clase media y alta pagaban por ver a personas con múltiples tatuajes cubriendo sus cuerpos en el circo o en las carpas de los fenómenos.

Muchas de las mujeres tatuadas que se exhibían en el circo contaban historias de que habían sido capturadas por salvajes y tatuadas a la fuerza por sus captores para atraer a más visitantes que pagaran por su acto, ya que sabían que las historias de peligro invocarían el miedo y causarían más interés en la multitud. Lo cierto es que las mujeres elegían voluntariamente hacerse tatuajes en la mayor parte de su cuerpo (algunas de ellas se cubrían casi por completo de la cabeza a los pies) y elegían con mucho cuidado los diseños de sus tatuajes.

El proceso de tatuaje en sí mismo todavía estaba en transición entre el método manual de "palo y pincho", que implicaba un palo afilado y un bote de tinta, y el método más moderno que utilizaba la máquina de tatuar que había sido inventada por Samuel O'Reilly en 1891. No fue hasta que Charlie Wagner patentó la primera máquina de tatuar de bobina y tubo en 1904 (que es casi idéntica a la máquina que siguen utilizando hoy en día los artistas del tatuaje) que la gente empezó a hacerse un mayor número de tatuajes, debido a este método más rápido y menos doloroso de tatuar.

Tatuajes de los años 60.

Más adelante, durante la guerra de Vietnam se produjeron importantes cambios en la sociedad. El espíritu patriótico desapareció, ya que la mayoría de la gente no apoyaba la guerra.

El movimiento por los derechos civiles y la revolución sexual también abrieron el mundo a la aceptación de los tatuajes, ya que el clima cultural pasó de ser conservador a ser abierto. Aunque la mayor parte de la sociedad seguía viendo los tatuajes como una tendencia de la clase criminal, los jóvenes rechazaban los valores tradicionales y exigían la igualdad social para todos. Los derechos de la mujer se convirtieron en un gran movimiento con tatuajes que mostraban sus gustos y creencias personales.

Tatuajes de los años 70.

La afluencia de talentosos artistas del tatuaje con formación en bellas artes supuso un cambio significativo en el mundo de los tatuajes en la década de 1970. Las imágenes de los tatuajes empezaron a diversificarse, incorporando líneas más suaves y una forma de arte más fluida, y comenzaron a dejar de lado las imágenes más simplistas de antaño, como las anclas y las águilas. También empezaron a entrar en escena más mujeres tatuadoras, lo que acercó aún más el mundo de los tatuajes al de las bellas artes y la música.

Tatuajes de los años 80.

Los diseños de tatuajes de líneas gruesas y negras, como el nudo celta, se hicieron populares en la década de 1980.  Fue la década de la cirugía plástica y de la gente que elegía expresarse con colores de pelo y estilos de ropa salvajes. La década de 1980 fue una época de rebelión y la escena punk explotó, fomentando los actos de autoexpresión rebelde entre los jóvenes de todo el mundo.

Tatuajes de los años 90.

Los años 90 traen consigo el auge del tatuaje tribal, el feminismo y un nuevo subgénero musical. Empiezan a surgir en la escena punk grupos exclusivamente femeninos, creando una nueva subcultura de mujeres fuertes e independientes.

Más allá de los cánones de belleza que las mujeres seguían y el cuidado de la piel que llevaban a cabo tan seriamente, quedó demostrado que importaba más el aspecto social que la propia obsesión por la piel que las mujeres tenían por entonces debido a que era “lo que las habían enseñado”. Si quieres saber más sobre el cuidado de la piel con un tatuaje, puedes optar por solicitar información a los mejores dermatólogos en Barcelona.

En 1996, más de la mitad de los que buscan tatuajes son mujeres. Los tatuajes comienzan a inclinarse hacia diseños más femeninos, con mariposas, corazones y estrellas que se fusionan con bandas tribales. El maquillaje permanente también vuelve a aparecer, y muchas mujeres optan por tatuarse permanentemente el lápiz de ojos y de labios. Las mujeres que han sobrevivido al cáncer también optan por cubrir sus cicatrices de mastectomía con bellos, femeninos y elaborados tatuajes.

Tatuajes de los Años 2000 en adelante.

Los tatuajes se han vuelto más seguros y más corrientes con las modernas precauciones de seguridad, como la esterilización, y cada vez más personas de generaciones anteriores que decidieron renunciar a los tatuajes en el pasado debido a los riesgos para la salud se están haciendo tatuajes. Muchos abuelos optan incluso por ir con sus nietos a hacerse tatuajes juntos. Cada vez son más los empleadores que adoptan sus códigos de vestimenta para permitir los tatuajes, ya que cada vez hay más personas que se unen a las filas de los coleccionistas de tinta.

Los tatuajes han evolucionado en cuanto a diseño, ubicación en el cuerpo y opinión social. Sin duda, se pueden ver correlaciones a lo largo de las décadas: el feminismo y el aumento de los tatuajes entre las mujeres es una de ellas, y la guerra y el aumento de la popularidad de los tatuajes patrióticos es otra.

Aunque no cabe duda de que existe un vínculo discernible entre los tatuajes y la época, la evolución de los tatuajes continúa y sólo podemos empezar a adivinar lo que el futuro deparará al mundo de los tatuajes.

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