Proponen que los “consoladores” pasen a llamarse “alegradores”
¿”Consolador” o “alegrador”? Te contamos por qué el término “consolador” ha dejado de tener sentido.
Llevamos toda la vida oyendo hablar de ese conocido juguete sexual como el “consolador”, pero si nos paramos a pensar sobre el origen de esta palabra y su significado, ¿es realmente apropiado llamar así al juguetito?
Cuando comenzó a utilizarse este artilugio, las mujeres tenían prohibido provocarse placer sexual solo por gusto. Por esto, este invento fue creado para consolar a las mujeres en momentos determinados de necesidad, como cuando estaban pasando por una etapa de histeria. De ahí que comenzara a venderse como "consolador”.
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Pero de esto hace muchos años y hace mucho tiempo que provocarse sexual a una misma es completamente legal, así que ¿por qué seguirlo llamando de la misma forma? Hay quien defiende que este término y su definición en la RAE tiene una connotación machista, como Platanomelón, la marca de juguetes eróticos que ha propuesto este cambio.
Platanomelón son partidarios de cambiar este nombre por uno más actual y que se corresponda con la función que el juguete sexual desempeña hoy día. Por ello, el nombre que han propuesto no es otro que “alegrador”. Y lo cierto es que se ciñe muy bien a su función.
Estamos seguras de que, llamándose de esta nueva forma, muchas mujeres se sentirían más libres de comprar y probar este tipo de juguetes, ya que quizás conseguiríamos romper el tabú de ver al "consolador" como algo prohibido o de lo que avergonzarse.
No hay duda de que los juguetes sexuales alegran más que consuelan, así que nos parece justo que su nombre sea actualizado. ¿Qué piensas tú de que el “consolador” pase a llamarse “alegrador”?
