Rodarte: La Bella Durmiente en la Noche Estrellada
LAS MULLEAVY EN LA NEW YORK FASHION WEEK
Rodarte: La Bella Durmiente en la Noche Estrellada
Rodarte desfilaban ayer en la New York Fashion Week. Las hermanas Mulleavy como siempre sorprendían con unas referencias tan dispares como La Bella Durmiente de Disney y Van Gogh con sus Girasoles y La Noche Estrellada.
Es curioso como poco a poco las Rodarte se posicionan con un público muy joven con las ideas claras, por ejemplo: Tavi la Style Rookie, Dakota y Elle Faning o Taylor Swift (todas en el público ayer). Son chicas que entienden la sensibilidad única de las Mulleavy y sus mash ups de inspiraciones dispares, además, pueden lucir alguno de sus looks en premieres y alfombras rojas, piezas no aptas para todos los públicos.
Es curioso que con un historial tan místico y culto en sus referencias e inspiraciones las Rodarte hayan apostado esta vez por algo tan consumista como Van Gogh que al final ha dejado de ser el rey post-impresionista a vender imanes de nevera como churros. Aún así, el hecho de que la Bella Durmiente forme parte de este crisol de referencias es motivador, y el resultado no está nada mal.
Es cierto que otras colecciones de Rodarte tienen más gancho y calidad a nivel creativo pero las Mulleavy no decepcionan. La colección para el verano 2012 es chic y femenina, con prints que beben directamente de los Girasoles y la Noche Estrellada de Van Gogh y sus colores, básicamente amarillos, azules y algún verde y lila.
Las prendas siguen con las siluetas habituales de Rodarte, juegos de escotes delanteros y traseros, pantalones tobilleros, vestidos por la rodilla o largos con un aire muy girlie y recatado y un tricot que enloquece. Precisamente se echa en falta algo más de punto en la colección, al fin y al cabo fueron esos jerséis deshilachados los que hicieron a las Mulleavy lo que son.
Personalmente me quedo con los tejidos brocados con dibujos de estrellas, no tan evidentes, de Van Gogh. Los conjuntos con pantalón, los zapatos metalizados y los fruncidos sin fin son de lo mejorcito de la colección. La verdad es bonita pero sin demasiados highlights. De los vestidos destacan los más sedosos, estilo mexicano en los escotes y de colores vivos.
La colección tiene un punto kitsch que hace que a ratos cueste seguirla y debas revisionarla para verle todo el potencial. Aún así, las Rodarte siempre serán las Rodarte y desde el maquillaje, la peluquería a cada detalle de las prendas y complementos merecen ser destacados.
¿Te ha gustado la colección?
